Buscó romper los viejos esquemas
corrompidos por años de silencios amordazados
y llantos contenidos en sucias almohadas
rellenas de lana y sudor.
Cuando intentó sublevar al pasado
con un grito de libertad, casi un
alarido azotado por la furia de
cadenas y bozales,
el monstruo agazapado en el lecho
envilecido por culpas y prejuicios,
le puso las negras garras en medio
del pecho y ese valor, economizado
a fuerza de promesas,
retornó mansamente a dormir
el sueño de la eternidad
total y absoluta.
19 comments:
Lo sueños escritos son hermoso.. un placer leerte-..
Un abrazo
Saludos fraternos..
Que disfrutes la semana.. mis mejores deseos...
Wow... qué palabras. ¿Será la libertad un sueño eterno? Quizá legué el día de la utopía-realidad.
A veces la libertad sólo es un sueño. Muy hermoso tu poema. Abrazos
Como siempre amiga, un placer haberme pasado de nuevo por tu casa.
Saludos y un abrazo.
Qué arrojados somos cuando soñamos, cuán valientes, hasta despertar...
Abrazos
Y soñamos y soñamos y soñamos...
Despertar ya es otra cosa.
Besitos
Que magnificas metaforas que hay en este breve poema, y sobre todo, que grandioso su final, triste, pero grandiosamente cierto.
"Será solamente una palabra, la hermana hermosa: la libertad"
Bello escrito
Soñamos con ella pero tal vez seamos más libres de lo que nos parece que somos. Creo que nos limitamos bastante...
Un saludo,
Mi querido Fernando: La tradición o el pasado pesa mucho sobre nosotros y hay que tener una fuerza inmensa para romper con todas esas cadenas que nos impiden llegar hasta la libertad.
Me quedo con cada uno de tus versos.
Brisas y besos.
Malena
Sin saber que esta vez la eternidad no tendría puntos suspensivos..
Hermoso, bellisimo...
Un abrazo.
Anna.
La conquista de la libertad es ardua y exige no temer al monstruo ni sus garras. Precioso poema, intensísimo. Un abrazo.
Algo de tu poema me remece profundamente...
Un gran abrazo, hermano mío.
Muchas veces nos pasamos la vida soñando con la libertad en lugar de luchar por ella.
Buen día
La libertad a menudo tan escasa.
Un saludo
Qué buen poema Fernando, esa llama que a veces no alcanza, que se muere. Un abrazo.
Cuando soñamos somos libres no tenemos que rendirle cuentas a nadie, ni siquiera a nosotros.
Un poema reflexivo, intenso, abarcador.
Abrazo tus alas.
M.
Para la libertad, hay que desprenderse. Pero no es fácil ni te lo hacen fácil.
Ir soltándose poco a poco de las cosas que nos atan, es posible.
De las que nos invaden el alma y atenazan el corazón, más difícil. Más fácil y cómodo, dormirlas.
Besos, Fernando.
querer es poder y muchas veces soñar es rozar la realidad...
Bss
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