Hoy me crucé con una pena larga y sombría que me tomó del brazo, esquivando las rotas veredas. Le pregunté con insistencia qué buscaba y sin mirarme, siquiera, me abandonó a la vuelta de una esquina.
A veces la pena es así: nos asalta en un callejón, para enseñarnos que nuestra vida no sólo está hecha de nuestra voluntad, sino también de los azares del destino...
Bueno al menos era una pena pasajera, de esas que vienen por un rato y luego se van por la primera esquina, no era de esas pegajosas, molestas que no se van nunca, algunas que vienen con justificada causa y otras porque si.
Mi querido Fernando: Las penas vienen cuando menos se las espera pero creo que pueden desaparecer cuando intentamos con todas nuestras fuerzas que desaparezcan.Dónde sea, pero que desaparezcan.
27 comments:
Algunas penas vienen y van, no tiene sentido ahondarlas.
Bellas palabras Fernando.
MaLena.
Larga y sombría
como nuestra propia sombra
siempre a nuestros pies:
la pena
que se arrastra
para que la veamos
y querramos arrastrarnos con ella.
A veces la pena es así:
nos asalta en un callejón,
para enseñarnos
que nuestra vida no sólo está hecha
de nuestra voluntad,
sino también
de los azares del destino...
Hermosa reflexión,
como siempre...
Abrazos,
Quizas se pierda...cuando veas las veredas luminosas.
Beso amigo mio
Menta
¡Ufffff! Menos mal que te abandonó esa pena. No dejes que ninguna otra te coja del brazo. Besos, querido amigo.
Mejor que te dejen las penas y se vayan a otro lado. Abrazos
Muy original, creativo y muy buen final.
Abrazos, hermano.
Quizás sólo queria un poco de compañía mientras llegaba a su destino.
Saludos.
Bueno al menos era una pena pasajera, de esas que vienen por un rato y luego se van por la primera esquina, no era de esas pegajosas, molestas que no se van nunca, algunas que vienen con justificada causa y otras porque si.
Prestamela a ver si me abandonan rápido las mias.
No creo que nadie la eche en falta cuando una pena se va aunque sea sin despedirse.
Un saludo
Pues eso es lo mejor de esa pena, que se perdiera tras la primera esquina. Que ´no caben tantas en el alma...
Abrazos
Un poema bello.. grcias por compartirlo..
Un abrazo
Saludos fraternos...
Que disfruten del fin de semana..
¿La pena vale la pena?
Una suerte que no se entretuvo mucho. Tal vez conmigo hubiera estado más tiempo.
Besitos besitos
Una pena silenciosa, una pena cómplice de sí misma...
genial.
Un abrazo.
Anna.
Hola amigo, hay penas que asi como llegan se van. Un gusto leerte. Besos, cuidate.
Mi querido Fernando: Las penas vienen cuando menos se las espera pero creo que pueden desaparecer cuando intentamos con todas nuestras fuerzas que desaparezcan.Dónde sea, pero que desaparezcan.
Brisas y besos.
Malena.
P.D/ Acabo de llegar de viaje.
Pues si era una pena, mejor que te haya abandonado...
sin embargo, te ha dejado con unas bonitas palabras para describirlo...
Un saludo,
Mucho mejor!!
Cariños.
Es cierto que hay penas pasajeras...yo las suelo llamar angustias momentáneas.
precioso poema.
abrazos
Primerola humorada:
Menos mal que se fue enseguida, habrá visto a otro a quien colgársele.
Ahora, me encantó lo delicado del poema.
Un abrazo
A veces, sin saber por qué la tristeza te asalta, pero igual que viene se vá.
Qué coincidencia, me pasó igual hace un tiempo.
Un abrazo
Así es la pena... nos arrastra y nos deja... esquinados.
y más...
Son como vagabundas...viajeras en su mision..con propositos de hacerse sentir..para despues esfumarse.. A veces!
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